Hatha yoga: una mujer hace la postura del árbol.

Hatha yoga: todo sobre el estilo de yoga más popular

El hatha yoga es, probablemente, el estilo de yoga más conocido y el que se suele ofrecer en muchos cursos. Esta modalidad se basa en tres pilares: el cuerpo, la respiración y la meditación. Al realizar las distintas asanas del hatha yoga, siempre hay que emplear la técnica de respiración correcta y terminar cada sesión con un ejercicio relajación final. De este modo, no solo fortaleces el cuerpo, sino que también llegas a conocerte mejor y tomas una mejor consciencia de tu cuerpo. Además, el hatha yoga resulta ideal para principiantes. En este artículo te explicamos en qué consiste el hatha yoga y qué otros tipos de yoga se derivan de él.

Yoga clásico: una mujer realiza la postura de la cobra en una clase de yoga.

Tabla de contenido

  • Breve introducción al hatha yoga

  • Los 3 pilares del hatha yoga

  • Yoga Iyengar, yoga kundalini y tao yin

¿Qué es el hat­ha yoga y a quién va di­ri­gi­do?

La idea que mucha gente tiene del yoga se basa principalmente en el hatha yoga y sus principios. Resulta perfecto para principiantes, ya que ofrece una buena introducción al mundo del yoga, además de tener muchos ejercicios asequibles incluso para aquellos con menos experiencia. Lo bueno de esta variante clásica del yoga es que su gama de asanas puede adaptarse a tu nivel de forma física. Así pues, con el hatha yoga no solo tendrás la oportunidad de mejorar tu estado de forma, sino que con el paso del tiempo podrás ir aumentando el nivel con asanas más complicadas.

Hatha es una palabra que proviene del sánscrito antiguo y tiene distintos significados: fuerza, violencia, obstinación y persistencia. Sin embargo, si separamos la palabra en dos partes, vemos que “ha” significa Sol y representa nuestra alma, mientras que “tha” significa Luna y hace referencia a nuestra consciencia. Simbólicamente, la palabra combina las fuerzas opuestas del cielo en una sola.

Los 3 pi­la­res del hat­ha yoga: ejer­ci­cios para cuer­po, men­te y alma

En el hatha yoga, el ser humano se considera una unión de cuerpo, mente y alma, con lo cual todas las partes de su práctica abordan los tres componentes por igual. El hatha yoga consiste en asanas (ejercicios físicos), pranayamas (ejercicios de respiración) y una savasana final (relajación profunda, meditación).

A continuación, te presentamos de forma detallada los tres pilares del hatha yoga. Los ejercicios físicos están diseñados para fortalecer el cuerpo, mientras que los ejercicios de respiración que los acompañan y la relajación final te ayudan a concentrarte y a encontrar tu paz interior.

Ejer­ci­cios de cuer­po: las asa­nas

Las asanas fortalecen los músculos, los tendones y los ligamentos, además de aliviar tensiones y liberar energía. Existen diferentes ejercicios para partes específicas del cuerpo. Algunas posturas, como la del perro que mira hacia abajo, sirven para estirar toda la columna vertebral y los omóplatos. Otros ejercicios, como el pavanamuktasana (liberación del viento) tienen un efecto positivo sobre el aparato digestivo y los órganos del cuerpo. Ejercicios como la talasana (postura de la montaña) sirven para abrir el pecho, volviéndose la respiración más libre y recibiendo el cerebro más oxígeno.

Según un estudio de la Universidad de Wayne, en Detroit, hacer 20 minutos de hatha yoga tiene un efecto más positivo en nuestra capacidad cognitiva que invertir 20 minutos en cualquier otro tipo de actividad física.

Ejer­ci­cios de res­pi­ra­ción: los pra­na­ya­mas

Los pranayamas te ayudan a prestar atención a tu respiración durante los ejercicios físicos. De este modo, se transfiere más oxígeno al cuerpo y se libera la energía vital, el prana. A menudo, damos por sentada la respiración y no le damos importancia ni le prestamo la atención debida. Como resultado, respiramos de forma superficial e inconsciente en nuestro día a día. Esto provoca que nos cansemos mucho más rápido y nos sintamos agotados, ya que el cerebro y los órganos de nuestro cuerpo no reciben suficiente oxígeno. En el hatha yoga se aprende a dejar fluir correctamente la respiración y a utilizarla de forma selectiva, lo cual ayuda a concentrarse mejor y a mantener la calma en situaciones de estrés.

Yoga clásico: una mujer hace la postura del perro que mira hacia abajo.

Meditación: la savasana

Al final de cada sesión de yoga debes dedicar entre 10 y 15 minutos a la savasana. Se trata de ejercicios específicos de relajación que puedes hacer tumbado o sentado. Dichos ejercicios reducen las hormonas del estrés, fortalecen el sistema inmunológico y llevan la mente, el cuerpo y el alma a un estado de completa relajación. Si dispones de poco tiempo para tus ejercicios, es preferible que hagas una asana menos en vez de descuidar esta última parte de la sesión. La savasana requiere un poco de paciencia por parte de los principiantes, ya que no todo el mundo entra de forma inmediata en el estado de relajación.

Otros factores necesarios para la práctica del hatha yoga son una nutrición adecuada y una actitud positiva. Una nutrición adecuada no solo consiste en comer sano y ecológico, sino también en ser consciente de ello. Comer y beber debe ser una experiencia agradable y consciente. Además, en el hatha yoga es importante no perder la actitud positiva, amable y auténtica por la vida, lo cual contribuye a la felicidad y al bienestar.

En las clases de hatha yoga, estos cinco aspectos básicos pretenden garantizar mayor atención y satisfacción, creando así una armonía entre mente, cuerpo y alma.

Otros ti­pos de hat­ha yoga

A lo largo de los años han ido surgiendo nuevas formas de hatha yoga, dando lugar a un amplio abanico de posibilidades con opciones para todo el mundo. No importa cuál sea tu nivel de forma física y mental, ya que los ejercicios pueden adaptarse a tus necesidades y capacidades. Así pues, tanto los principiantes del hatha yoga como los yoguis más experimentados encontrarán el estilo idóneo.

Yoga Iyen­gar, el yoga con ayu­das

Esta modalidad de yoga, llamada así porque fue desarrollada por el maestro B. K. S. Iyengar, hace especial hincapié en la postura corporal y en la correcta ejecución de las asanas. Por ello, el yoga Iyengar es especialmente conocido por el uso de ayudas, ya sea en forma de cuerdas, bloques o mantas. Estos y otros objetos hacen posible que tanto los principiantes como las personas mayores realicen correctamente las distintas asanas de yoga, pudiendo experimentar así todos sus efectos positivos.

Encontrarás más información sobre tipos de yoga potentes y físicamente exigentes en nuestro artículo sobre yoga dinámico.

El hospital Charité de Berlín ha demostrado en un estudio que con tan solo 90 minutos a la semana de yoga Iyengar se alivia mejor el dolor crónico de cuello que con los ejercicios de cuello estándar.

Yoga kundalini: un grupo de personas practica la postura del niño.

Yoga kundalini, el yoga espiritual

El yoga kundalini es la rama del hatha yoga que se basa principalmente en las enseñanzas espirituales del yoga. El objetivo del yoga kundalini es liberar las energías del cuerpo. Mediante una combinación de ejercicios de respiración, asanas, meditaciones y mantras, no solo se fortalece el cuerpo, sino que también se abre la mente. Así pues, el yoga kundalini es adecuado para todos aquellos que, además de la forma física, también aprecian y quieren vivir el lado espiritual del yoga.

Para más información sobre estilos de yoga más tranquilos, consulta nuestro artículo sobre yoga relajante.

Tao Yin: vi­vir el qi

El tao yin es la versión china del hatha yoga y se centra especialmente en la relajación profunda. Sirve para fortalecer la flexibilidad, la respiración y la columna vertebral, además de estirar los ligamentos. Este tipo de yoga sirve también como base para el tai-chi, el qigong y la meditación profunda y prolongada. Este tipo de yoga resulta adecuado para todos aquellos que estén interesados en las artes marciales o que quieran descubrir el mundo de la meditación por sí mismos.

En re­su­men

El hatha yoga ofrece a los principiantes una buena introducción al mundo del yoga. A través de la típica combinación de ejercicios físicos, técnicas de respiración y ejercicios de relajación, los principiantes pueden hacerse una buena idea de lo variado que puede llegar a ser el yoga. Pero también los yoguis más experimentados encontrarán un nuevo reto entre la amplia gama de asanas de esta variante clásica. Por todo esto, el hatha yoga es la opción perfecta para quienes buscan una mezcla equilibrada de esfuerzo físico y ejercicios de relajación guiados.

Para la práctica del yoga no necesitas mucho, tan solo tener la mente abierta, una esterilla de yoga y ropa deportiva cómoda.

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Fuentes de información:

https://hijodevecino.net/2012/08/27/los-significados-de-la-palabra-hatha/

(última consulta: 14.09.2021)

https://www.mundopsicologos.com/articulos/veinte-minutos-de-yoga-para-mantener-en-forma-el-cerebro

(última consulta: 14.09.2021)

https://www.yogateca.com/tipos-de-yoga/hatha-yoga/

(última consulta: 14.09.2021)

https://www.vitonica.com/entrenamiento/lo-que-puedes-esperar-de-una-clase-de-kundalini-yoga-el-yoga-de-la-energia-y-la-conciencia

(última consulta: 14.09.2021)

Fuentes de las imágenes:

iStock.com/Pinkypills

iStock.com/insta_photos

iStock.com/gradyreese

iStock.com/FatCamera

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