Cuidados para después de tomar el sol: cómo actuar en caso de quemadura solar y de insolación
Cuidados para después de tomar el sol:
cómo actuar en caso de quemadura solar y de insolación
Tomar el sol no solo hace que nuestra piel se broncee, sino que también es fundamental para que nuestro cuerpo tenga un buen nivel de vitamina D, la cual fortalece los huesos y mejora nuestro estado de ánimo[1]. Pero la exposición excesiva a los rayos solares también plantea una serie de riesgos. Sufrir quemaduras solares o una insolación son algunas de las consecuencias negativas de pasar demasiado tiempo al sol. A continuación, te mostramos cómo aliviar rápidamente tu piel en caso de que se produzca alguno de estos percances y te aconsejamos cómo hacer que tu piel sea más resistente a los rayos UV a través de la alimentación.
Cuidados para después de tomar el sol: lociones after sun y remedios caseros

Después de pasar unas horas al sol, debes seguir cuidando tu piel para no sufrir irritaciones como consecuencia de la exposición a los rayos solares. Para ello, se recomienda usar una loción after sun hidratante, las cuales se pueden extender con facilidad por la piel y se absorben rápidamente. Además, producen un agradable efecto refrescante. Si tienes una piel delicada, es recomendable que uses una loción sin perfume.
Antes de usar este tipo de productos, es importante limpiar bien la piel primero. Una ducha con agua tibia libera la piel y el cabello del sudor, la arena y el agua salada. Utilizando champú hidratante y acondicionador, evitarás que tu cabello quede dañado. Después de la ducha, sécate cuidadosamente para evitar irritaciones y evita exfoliar la piel durante las horas siguientes.
Si no tienes una loción after sun a mano, también puedes cubrir la piel irritada con yogur o requesón que haya estado en la nevera. Estos productos también refrescan la piel y le devuelven la humedad perdida. Sin embargo, no olvides retirarlos antes de que queden secos.
Si no tienes una loción after sun a mano, también puedes cubrir la piel irritada con yogur o requesón que haya estado en la nevera. Estos productos también refrescan la piel y le devuelven la humedad perdida. Sin embargo, no olvides retirarlos antes de que queden secos.
Primeros auxilios para quemaduras solares e insolaciones
Una quemadura solar es la consecuencia más habitual de permanecer demasiado tiempo bajo el sol. Las áreas afectadas de la piel se enrojecen y se sienten calientes. Además, pueden doler, picar o quemar[2]. Estos síntomas alcanzan su máximo punto de dolor al cabo de entre 24 y 36 horas. A partir de entonces, el área afectada comienza a pelarse y luego se cura. Si la quemadura es especialmente severa, también pueden llegar a formarse ampollas. En caso de náuseas, dolor de cabeza y/o fiebre, hay que acudir a un médico inmediatamente.
El mejor remedio para las quemaduras solares es enfriar el cuerpo con una ducha de agua fría[3]. Eso sí, para evitar cambios bruscos de temperatura, primero debemos proceder con agua tibia. Asegúrate también de beber agua suficiente para estar convenientemente hidratado. Una vez la piel se ha enfriado, puedes aplicar algún remedio casero para las quemaduras del sol. En este caso, extendiendo por ejemplo yogur natural sacado de la nevera sobre la zona afectada se pueden aliviar los síntomas[4]. Para ello, aplica el producto con suavidad con la ayuda de un paño húmedo a modo de compresa.
Si aparecen ampollas en la piel, debes evitar algunos remedios caseros como el del yogur, ya que puede causar inflamación. En estos casos, es mejor acudir al médico, quien podrá atenderte convenientemente.
Si aparecen ampollas en la piel, debes evitar algunos remedios caseros como el del yogur, ya que puede causar inflamación. En estos casos, es mejor acudir al médico, quien podrá atenderte convenientemente.
También puedes usar lociones y geles especiales para quemaduras solares como remedio. Por lo general, estos productos específicos contienen aloe vera, manzanilla y pantenol, por lo que tienen un efecto antiinflamatorio, además de refrescante.
Mientras se curan las quemaduras, debes evitar ponerte otra vez al sol a toda costa para no agravar el daño. Incluso una vez curadas las quemaduras, deberás permanecer el máximo tiempo posible en la sombra, protegiendo tu piel con ropa ligera.
Si has sufrido una insolación, no lo notarás hasta pasado un tiempo. En este caso, la excesiva exposición al sol de cuello y cabeza provoca una irritación de las meninges. Los síntomas de una insolación son los siguientes: dolor de cabeza, mareos y náuseas e incluso vómitos[5]. En caso de experimentarlos, debes buscar un lugar fresco y con sombra inmediatamente, y poner las piernas en alto. Cubrir el cuello con algo fresco ayuda a aliviar los síntomas. Asimismo, es fundamental beber mucho líquido. En caso de tratarse de una insolación leve, estas sencillas medidas ya bastarán. No obstante, si los síntomas progresan, no queda otro remedio que consultar con un médico.

La dieta del sol: un protector solar natural
Una alimentación adecuada proporciona a tu cuerpo los nutrientes y minerales esenciales que este necesita para determinadas áreas y funciones. Muchos alimentos aportan también componentes que funcionan como protectores solares naturales. Siguiendo una dieta rica en nutrientes esenciales, puedes hacer que tu piel sea más resistente a la luz solar y formar una protección UV de forma natural.
Para que esta dieta solar tenga los efectos deseados, debes comenzarla, como mínimo, ocho semanas antes de empezar a tomar el sol[6]. De esta forma, darás tiempo a tu piel para que aproveche los nutrientes y forme la protección natural. Además, una alimentación adecuada también puede ayudar a reducir más rápidamente los efectos de las quemaduras solares, e incluso acelerar el proceso de curación. Estos son los principales nutrientes y alimentos que debe incluir la dieta[7]:
- Vitamina A: regeneradora de células, la encontrarás en lácteos, zanahorias, coles y albaricoques.
- Vitamina E: capta los radicales libres que se forman al tomar el sol y facilita la curación de heridas. Las nueces y los aceites vegetales de alta calidad contienen esta vitamina.
- Vitamina C: es un antioxidante y también neutraliza los radicales libres. Se encuentra en cítricos, kiwis, frutos rojos y pimientos rojos.
- Zinc: es bueno para el metabolismo, la cicatrización de heridas y la regeneración celular. Este oligoelemento se encuentra en las carnes rojas, nueces, queso, legumbres y productos integrales.
- Betacaroteno: este pigmento prolonga activamente la protección de la piel. Lo contienen las frutas y verduras de color naranja y verde, como zanahorias, albaricoques, espinacas y canónigos.
- Astaxina y licopeno: estos carotenoides dan color a muchos alimentos y proporcionan protección solar[8]. Los encontrarás en frutas y verduras como tomates, sandías y pomelos.
En conclusión, una dieta adecuada nos puede proporcionar parte de la protección solar que necesitamos. Aunque la cantidad diaria recomendada de fruta y verdura que debemos tomar puede variar según las fuentes que consultemos, por lo general se aconseja consumir estos tipos de alimentos cinco veces al día[9]. Entre los alimentos que te pueden ayudar a reforzar la protección solar natural que genera tu cuerpo están las zanahorias, los tomates, los albaricoques y los cítricos, entre muchos otros. Comer un puñado de nueces al día es igualmente un buen complemento para la dieta. Siempre que puedas, elige productos integrales y aceites vegetales de alta calidad para cocinar, y consume diariamente productos lácteos, como queso y yogur[10]. Si sigues estas pautas, no solo contarás con más protección solar, sino que también tendrás una vida más sana.
Una dieta rica en nutrientes puede proteger, hasta cierto punto, tu piel del sol. Sin embargo, esto no reemplaza en ningún caso el uso de la ropa adecuada y de protectores solares.
Una dieta rica en nutrientes puede proteger, hasta cierto punto, tu piel del sol. Sin embargo, esto no reemplaza en ningún caso el uso de la ropa adecuada y de protectores solares.
En resumen
Siguiendo una dieta equilibrada y rica en nutrientes podemos reforzar la protección natural que nuestro cuerpo genera para minimizar el efecto de las radiaciones UV. A pesar de ello, la alimentación no sustituye otras formas de protección como son el uso de cremas solares y llevar una vestimenta adecuada. Si has pasado demasiado tiempo al sol y sufres quemaduras, las lociones especiales o algunos remedios caseros como el yogur pueden ayudar a aliviar los síntomas. Toda la información sobre protección solar la encontrarás resumida en nuestro práctico PDF.
Fuentes de información
[1] https://www.muyinteresante.es/salud/articulo/asi-afecta-la-falta-de-vitamina-d-al-estado-de-animo-631417601261
[2] https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/sunburn/symptoms-causes/syc-20355922
[3] https://www.creasalud.com/quemaduras-producidas-por-el-sol
[4] https://mejorconsalud.com/tratar-las-quemaduras-solares-5-remedios-naturales/
[5] https://www.sanitas.es/sanitas/seguros/es/
[6] http://www.upsocl.com/verde/protector-solar-a-la-carta-estos-alimentos-contienen-fps-natural-y-deberias-comenzar-a-comer-mas-de-ellos/
[7] https://www.natursan.net/alimentacion-para-tomar-el-sol/
[8] https://www.europapress.es/chance/
[9] https://elpais.com/elpais/2017/03/30/
[10] https://www.infosalus.com/nutricion
Fuentes de las imágenes:
iStock.com/FotoDuets
iStock.com/RossHelen
iStock.com/StudioMars