Camisas de verano

Una camisa femenina debe realzar tu figura. Por ello, es importante elegir un modelo que se adapte a tu tipo de cuerpo. En general, se distinguen tres variantes principales:

• Tipo H: caracterizado por una figura deportiva y recta, con caderas y cintura estrechas. Si perteneces a esta categoría, deberías resaltar tus puntos fuertes, por ejemplo, con camisas ajustadas, escotes en V, fruncidos o volantes que añadan volumen. Para enfatizar la cintura, puedes meter la camisa dentro de los pantalones o la falda.

• Tipo A: generalmente tiene un busto estrecho y caderas pronunciadas. Las camisas largas con botonadura completa son perfectas para este tipo de cuerpo, ya que alargan y disimulan la parte inferior del cuerpo. También las camisas con lazo en el cuello armonizan bien con esta silueta.

• Tipo V: caracterizado por hombros anchos y caderas estrechas. Un escote en V adelgaza visualmente la parte superior del cuerpo. Una camisa cruzada, en cambio, resalta el escote y atrae la atención hacia tus puntos fuertes.

Las camisas de verano para mujeres se presentan en muchos cortes diferentes y son una excelente alternativa a vestidos, camisetas o tops de verano. Un clásico es la camisa: reconocible por su botonadura frontal y cuello. En verano, a menudo se encuentra de manga corta, pero también existe de manga larga, enrollable y sujeta con un botón.

Otro modelo muy apreciado es la camisa sin mangas. Veraniega y aireada, es perfecta para las vacaciones en lugares cálidos. Las túnicas, amplias y cómodas, son de las camisas de verano más queridas. Se distinguen por el escote redondo, a veces con una corta botonadura o lazos, o por el escote en V.

Perfectas con pantalones ajustados o leggins son las camisas largas, especialmente si son sin mangas o con mangas enrolladas. Pueden tener una botonadura completa o un corte tipo túnica o camiseta con escote redondo o en V. Muy ligeras y apreciadas son también las camisas de gasa. El tejido etéreo deja pasar el aire y otorga un toque elegante y refinado, tanto de manga larga como corta.

Las camisas ligeras son de las prendas favoritas para la temporada cálida. Son femeninas y versátiles: elegantes, casuales, deportivas o glamurosas. Para un look de oficina, elige una camisa clásica con botones. En verano, puede ser de tejidos ligeros como la seda o la viscosa, similares a los de tus vestidos de noche.

Con un traje oscuro, combinan muy bien los colores intensos como el fucsia o el naranja. Si optas por blazers y pantalones en colores claros como nude o gris claro, los tonos pastel son perfectos. Los accesorios en la oficina deben ser discretos: con el fucsia, por ejemplo, quedan bien los accesorios de plata como un collar con un pequeño colgante o pendientes de perlas, además de un anillo delgado. Los tonos como el albaricoque combinan muy bien con el oro.

En el tiempo libre, vale todo: por ejemplo, puedes optar por una camisa a cuadros, un clásico atemporal, para combinar con jeans usados y zapatillas. Una chaqueta de cuero añade un toque rockero a tu atuendo, especialmente si es un poco oversize.

O atrévete con una camisa de verano con flores, pantalones cortos de mezclilla y cómodas sandalias. Como accesorios, puedes usar un sombrero suave, joyas coloridas y un bolso con flecos: y aquí tienes un look hippie creativo.

Para la noche, en cambio, se necesita un toque de glamour: la camisa de encaje elegante entra en escena. El encaje perforado es ligero y sexy al mismo tiempo, y combina perfectamente con una falda ajustada o jeans de moda. Los accesorios pueden ser discretos: joyas finas en oro o plata son suficientes, porque la camisa blanca de encaje ya atrae toda la atención.

También la camisa con volantes es perfecta para la noche. En una versión amplia, combina maravillosamente con jeans usados: una mezcla de estilos ideal para todas las mujeres a la moda que quieren demostrar su gusto fashion.

Las camisas de verano para mujeres son atemporales. Resisten muchas temporadas y se usan con gusto. Especialmente las camisas blancas y las túnicas de colores no pasan nunca de moda. Para mantenerlas bonitas durante mucho tiempo, es importante lavarlas y cuidarlas de la manera correcta. Así, los colores permanecen brillantes y el blanco resplandece.

Un factor importante es la temperatura de lavado. El algodón y las fibras sintéticas como el poliéster pueden lavarse a máquina a 40 grados: sin embargo, siempre revisa la etiqueta. Las camisas blancas se vuelven impecables con un detergente universal. Para las de colores o estampadas, es mejor usar un detergente para prendas de color, que protege los tintes incluso después de muchos lavados.

La viscosa y la seda deben lavarse a 30 grados. La seda, en particular, requiere un cuidado delicado: ajusta la lavadora al programa para prendas delicadas o lavado a mano y usa un detergente específico para lana y seda. Para secarlas, es mejor colgarlas en una percha: así, las fibras se estiran durante el secado y, a menudo, ni siquiera es necesario planchar.

Si es necesario planchar, gira la camisa del revés y utiliza una temperatura baja. Una toalla suave entre la plancha y el tejido protege aún más las fibras e impide que el material se vuelva brillante.

¿Buscas algo nuevo en tu armario y quieres renovar tu colección de camisas de verano? Entonces echa un vistazo a la selección en línea de C&A: encontrarás camisas ligeras para cada ocasión y estilo. Desde modelos básicos hasta camisas estampadas o con corte sencillo: ¡seguro encuentras la ideal para ti!