Nochevieja con niños: consejos y juegos de Fin de Año para los más pequeños

Para los niños, el cambio de año supone un acontecimiento muy emocionante: toda la familia está de celebración y pueden quedarse despiertos hasta muy tarde. Comerse las doce uvas a la medianoche es para muchos pequeños el punto culminante de la noche. Para que toda la familia disfrute al máximo de la Nochevieja, a continuación te proponemos algunas ideas de juegos y actividades que harán que el tiempo pase volando. También te proponemos unos cuantos consejos para pasar de la forma más relajada posible el primer Fin de Año con un bebé.

La forma de pasar el Fin de Año difiere de una familia a otra: si se va a festejar con los abuelos, tíos y demás parientes o si solamente lo vais a celebrar con los de casa con una cena de Nochevieja es algo que depende de cada cual. Sea cual sea el caso, lo importante es que todos los miembros de la familia se diviertan y disfruten de la última noche del año. Para que la celebración sea lo más agradable posible, sobre todo para los más pequeños, hemos recopilado algunos consejos de Nochevieja para niños de todas las edades.

El primer Fin de Año como padres se acerca. Por supuesto, la Nochevieja sigue siendo un motivo de celebración aun teniendo un bebé, aunque la nueva situación implica realizar algunos cambios en la rutina habitual. Con la ayuda de los siguientes consejos, podréis vivir una primera Nochevieja todos juntos sin demasiadas preocupaciones:

• Acostad al bebé a la hora habitual. Muchos bebés duermen incluso cuando hay ruido estridente de fondo, ya sean fuegos artificiales o gritos de euforia. Aun sí, siempre deberíais estar atentos por si vuestro hijo se despierta.

• Todo lo que planifiquéis, que sea relajado. Por ejemplo, una velada acogedora disfrutando de la Nochevieja en pareja.

• Por supuesto, no tenéis por qué pasar solos la Nochevieja. Podéis invitar perfectamente a amigos o familiares, aunque una cena tranquila y actividades relajadas como los juegos de mesa deberían marcar la tónica general de la celebración. Es importante que todos los invitados sepan de antemano que no se quiere hacer una celebración ruidosa.

• Lo ideal es celebrar la Nochevieja con otros padres, quienes entenderán qué tipo de fiesta es la más conveniente para el momento.

Un Fin de Año con un niño pequeño (de 2 a 4 años) requiere una planificación a conciencia. A estas edades, es muy probable que tu hijo ya quiera participar en la celebración de la Nochevieja. Sin embargo, aún es demasiado pequeño para ir a dormir muy tarde. Con el fin de evitar posibles frustraciones y un exceso de cansancio, debes tener en cuenta lo siguiente si vas a celebrar la Nochevieja con un niño pequeño:

• Manda tu hijo a la cama a la misma hora de siempre. Para los niños más pequeños, la Nochevieja es una noche como cualquier otra, ya que son los adultos quienes le añaden un significado especial al cambio de año. Si tu hijo se despierta a medianoche por su cuenta, puede, por supuesto, comerse las uvas con vosotros y disfrutar de los fuegos artificiales, si los hay.

• También tienes la opción de adelantar la celebración de la Nochevieja. Esta es una opción que funciona bien si hay muchos niños de una edad similar en tu círculo de amigos. En ese caso, reuniros con otras familias y celebrad el Fin de Año de forma anticipada, por ejemplo, a las 7 o a las 8 de la tarde, igualmente con comida deliciosa, decoraciones para la ocasión, bengalas y las tradicionales uvas de la suerte.

• Algunos niños se asustan si se tiran petardos y fuegos artificiales, por lo que es importante que noten a sus padres cerca y se mantengan a una distancia suficiente del ruido. Para estar del todo seguros, es preferible que los pequeños se queden en casa en un entorno controlado mientras miran los fuegos por la ventana.

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Ten en cuenta que...

Los fuegos artificiales solo deben encenderse al aire libre y ser manipulados por adultos. Los niños deben permanecer siempre a una distancia segura de los fuegos y estar siempre vigilados por un adulto de la familia. Los menores de 12 años tampoco deberían encender bengalas sin supervisión.

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Aunque a tu hijo le haga ilusión vestirse para la ocasión, estar despierto hasta la madrugada y celebrar la Nochevieja como los adultos, el rato de espera hasta las campanadas y las horas de después pueden llegar a ser muy largas para un niño. Para que el tiempo le pase volando, te proponemos algunas actividades y juegos de Nochevieja para niños que son un seguro de diversión y buen humor.

Para este juego solo vais a necesitar una hoja de papel y un bolígrafo. Escribid los números del 1 al 20 de forma aleatoria y sin orden aparente en la hoja de papel, rodeando cada número con un círculo, formando así las boñigas.

El objetivo del juego es conectar por turnos y con una línea las boñigas de forma ordenada, es decir, la 1 con la 2, la 2 con la 3 y así sucesivamente. Todo esto sin que las líneas se toquen o se superpongan. Así pues, cada jugador debe conectar las boñigas de manera que sea lo más difícil posible llegar hasta las siguientes. Quien tenga creatividad, un pulso firme y algo de picardía estará más cerca de la victoria.

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Un consejo extra para un Fin de Año con niños

Una buena idea para la celebración de la Nochevieja es implicar a los niños en la preparación de la misma. Por ejemplo, si a tu hijo le gustan las manualidades, podéis elaborar juntos guirnaldas de banderines hechos con papel o retales. Se trata de una buena oportunidad para que tu hijo haga volar su imaginación tanto como quiera.

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Con las siguientes dos ideas que combinan juegos y manualidades, podréis repasar lo que ha dado de sí el año de una forma muy moderna y original. Hay dos maneras de hacerlo, una de las cuales requiere un poco más de preparación, mientras que la otra puede hacerse de manera improvisada:

Con este juego, los niños pueden jugar con su creatividad y convertirse en diseñadores de moda. Para que el desfile sea todo un éxito, hay que recolectar unos cuantos periódicos durante los días previos. También necesitaréis tijeras y cinta adhesiva. El juego consiste en crear un estupendo vestido de noche con el papel de periódico. Quien diseñe el outfit de Nochevieja más bonito en un tiempo determinado, y además pueda ponérselo, será el ganador del concurso de moda.

¿Buscas una actividad sencilla que además resulte totalmente deliciosa? Entonces, ¡haced un concurso de figuritas hechas de masa! Para este juego comestible solo necesitaréis unos pocos utensilios:

• fogón o placa de cocina

• sartén

• cazo pequeño o jeringa de pastelería

• espátula

• aceite

• masa para tortitas (receta básica: 2 huevos, 200 ml de leche, 200 g de harina, 60 ml de agua, 1 pizca de sal)

Todos los participantes reciben una pequeña porción de masa sin cocer que deberán verter cuidadosamente en la sartén intentando formar una figura (por ejemplo, una estrella, una hoja, una media luna, un corazón, etc.). Los demás jugadores deberán tratar de adivinar a qué objeto se corresponde la figura. La tarea se simplifica si se utiliza una jeringa pastelera. Quien consiga adivinar primero de qué forma se trata podrá comerse la pequeña tortita.

Importante: Asegúrate de que ni tu hijo ni ningún otro niño se acerca demasiado a la sartén caliente.

¿Qué mejor que empezar el año nuevo con esperanza y buenos deseos? Con esta pequeña actividad, podrás hacer que tu hijo exprese sus deseos de forma tangible. Para ello vais a necesitar:

• macetas pequeñas (preferiblemente, de diferente colores)

• un poco de tierra para plantas

• bulbos de tréboles de cuatro hojas

• utensilios para manualidades (papel de colores, bolígrafos, tijeras, pegamento)

Para llevar a cabo esta actividad, todo el mundo debe escribir su deseo para el próximo año en un papelito. A continuación, doblad el trozo de papel y colocadlo en el fondo de una maceta. Llenad luego las macetas con tierra y plantad los bulbos de trébol según las instrucciones del envase. Es posible que tengas que ayudar a tu hijo en este paso.

Colocad las macetas con los deseos enterrados en un lugar de honor cerca de alguna ventana. Ya solo quedará dejar que crezcan los brotes de los tréboles de los deseos a lo largo de los meses del nuevo año. De este modo, tu hijo verá crecer de forma simbólica su deseo. Una vez las pequeñas plantas han crecido, pueden cortarse, prensarse y guardarse como tréboles de la suerte.

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¿Sabías que...

durante la Nochevieja también hay sitio para los juegos clásicos atemporales? Juegos como el ¿quién soy?, el alto el lápiz o el juego de las sillas siempre son bien recibidos en cualquier ocasión. Los juegos de mesa y de cartas también son una apuesta segura para pasar un buen rato en familia. En este caso, puedes recurrir a los juegos que tengas en casa o inventaros uno nuevo relacionado con el año nuevo.

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